Cultiva en casa tus brotes de salud


Weekly sprout harvest, originalmente cargada por BKMD.


Las semillas siempre han disfrutado de gran prestigio nutricional.
Nuestras abuelas nos han aconsejado desde pequeños comer habichuelas, lentejas, garbanzos.
los cereales del desayuno son otro ejemplo de la fuerza que aportan las semillas.
Otro ejemplo son los aceites de girasol, sésamo, soja y el de oliva...
En España legumbres y cereales han formado tradicionalmente parte de nuestra dieta.

En los últimos 20 años se ha ido poniendo de moda otro gran secreto de alta nutrición:
Los germinados.

Comer germinados es como comer la semilla a su enésima potencia,
con todo su potencial vital Y (como diría la medicina ayurvédica, cargado de prana)
Con la germinación se liberan las energías latentes en el grano.
El almidón se convierte en azúcar y las proteínas en aminoácidos.
Las vitaminas y encimas se sintetizan convirtiendo el germinado en un autentico proceso de pre-digestión.

Proceso de germinado:

Cualquier grano y semilla puede ser germinado:

garbanzo
alfalfa
trigo
cebada
avena
sésamo
lino
pepita de calabaza
etc.

Solo necesitas calor, humedad y oscuridad. En la foto puedes ver un germinador de cerámica.
También puedes fabricarte tu uno o bien comprar algo mas sofisticado (eléctrico).
El de la foto cuesta 17.50 euros (si quieres saber donde adquirirlo pincha arriba en el título)
El eléctrico te cuesta alrededor de 100 euros

El proceso es simple y dura varios días.
Primero deja eclosionar la semilla o legumbre en la oscuridad, después de varios días, cuando el tallo ha crecido, dale luz indirecta solar para que gane en clorofila. Debes cambiar el agua a diario, en verano 2 veces al día.

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